133 Wai Yip Street / MVRDV

Curado por ArchDaily

Arquitectos: MVRDV; MVRDV
Año: 2016
Fotografías:Ossip van Duivenbode

Descripción enviada por el equipo del proyecto. MVRDV ha abierto en 133 Calle Wai Yip en Hong Kong. Una transformación de oficina, locales comerciales minoristas y restaurantes, desnudando un antiguo edificio industrial hasta sus huesos y utilizando nada más que vidrio como revestimiento y acero inoxidable para construir los espacios ineriores. El proyecto de 18.000m2, situado frente al mar Kwun Tong es parte de un plan de desarrollo urbano más grande, que tiene como objetivo convertir el distrito post-industrial de East Kowloon en el nuevo distrito central de negocios de Hong Kong (llamado CBD2). Al ver a través de la oficina, su totalidad se presenta como un ejemplo para los objetivos del proyecto, crear la máxima transparencia en el lugar de trabajo. El proyecto fue encargado en 2013 por el promotor del proyecto, GAW Capital, y ahora se coloca como uno de los proyectos emblemáticos para el desarrollo de nuevos negocios, convirtiéndose en el puente entre las raíces industriales del barrio y su futuro metropolitano.

Con superficie construida en un sector premium en Hong Kong, MVRDV tuvo como objetivo crear un espacio de oficina que ofreciera el atractivo y espacio percibido máximo con el fin de proporcionar un entorno de trabajo lo más agradable posible. El edificio fue desnudado hasta su hermosa estructura primaria, con todos los adornos innecesarios siendo retirados. Sólo entonces se añadió relleno a la construcción, en forma de pintura blanca, vidrio y acero inoxidable con el fin de mantener y resaltar la pureza de la estructura desnuda. Lo viejo y nuevo se distinguen fácilmente, mientras que el funcionamiento interno del edificio está en exhibición para que todos lo vean. ¿Pero cómo se cra un entorno de oficina que también trae consigo pureza y simplicidad en su diseño? La respuesta, mesas de vidrio, estanterías, pisos, altavoces, ordenadores, paredes - una oficina totalmente de vidrio, libre de obstáculos visibles. La oficina modelo se presenta como un ejemplo para que los inquilinos instalen de esta forma sus espacios de trabajo si así lo desean.
"Estamos entrando en una sociedad transparente, las empresas son cada vez más abiertas al público, a las personas les importa más lo que sucede detrás de las puertas cerradas. De ese modo, un espacio de trabajo claro no deja nada por cuestionarse, no hay nada oculto; genera confianza," dice el co-fundador de MVRDV, Winy Maas, "Pero también es una oportunidad para que el edificio se convierta en un recuerdo de la historia industrial de la zona, monumentalizada en una caja de cristal."

133 de la Calle Wai Yip toma un nuevo enfoque para el desarrollo en Hong Kong, la reutilización del edificio existente y reforzar el carácter original de la zona en lugar de una tábula raza y una nueva construcción. El objetivo fue exponer el funcionamiento interno del edificio, incluida la estructura y las instalaciones, pero no sólo esto, sino mostrar el movimiento del libre flujo al interior del edificio, el funcionamiento interno de las empresas en el interior y los componentes técnicos que permiten que la oficina funcione. El cristal revela los movimientos arriba y abajo del edificio una vez que se recibe a las personas en el vestíbulo con una gran escultura que fue especialmente diseñada, la luz; incluso las escaleras de emergencia están encerrados en vidrio resistente al fuego.

Los pisos inferiores reactivan el dominio público a través de la adición de un programa diferente. La planta baja consta de locales minoristas, mientras que las dos plantas por encima de esta se reservan para los restaurantes. Un espacio en el tejado, así como balcones en cada planta, da a los residentes del edificio acceso al exterior; lugares ideales para apreciar las vistas hacia afuera sobre la línea de costa. El antiguo edificio se cerraba de la calle detrás de paredes de hormigón y pequeñas ventanas. Con el fin de humanizar el entorno y crear un entorno más accesible por todos los lados, la fachada posterior ha sido despojada nuevamente y se reemplaza con acristalamiento. Lo cual permitirá que las zonas comunes y de circulación vertical del edificio están expuestas, dando a los peatones una penetración en los acontecimientos de cada oficina y el movimiento de los que está al interior.

Los interiores previamente oscuros y laberínticos han sido completamente despojados para abrir el programa y permitir que la luz fluya a través del edificio. Las zonas comunes, servicios y circulaciones verticales se han movido hacia la parte trasera del edificio. La planta ahora permite a cada piso o bien ser ocupado por un inquilino, o para que puedan ser separados en cuatro espacios de trabajo separados a través de la adición de la luz, un relleno esmaltado.

A pesar de las grandes cantidades de elementos de cristal, el edificio tiene un consumo un 17% menor de energía anual, así como una demanda máxima de electricidad un 15% menor en comparación con el promedio de las oficinas en Hong Kong. MVRDV comenzó a trabajar en el proyecto en abril de 2013 y desde entonces han trabajado en colaboración con sus compañeros de Arch-Innovativ.

La Oficina de cristal es, por ahora, el último proyecto de MVRDV en una exploración en curso sobre los usos alternativos del vidrio en la arquitectura. Los proyectos anteriores incluyen: la Markthal, con ventanas de 40 x 40 metros; una granja de vidrio, con vidrio impreso como un monumento a la historia local; Casas de cristal en la que una fachada histórica se construyó con ladrillos de vidrio veneciano; y la cocina infinita este año en el Bienal de Arquitectura de Venecia, que ofrece una visión provocadora anti-cíclica con el tema "informando desde el frente", en el que la celebración de la alimentación juega un papel vital.